Un entrante ligero y delicioso que les hará sentirse especiales.

Dificultad: media
Costo: alto
Tiempo de preparación: 30 minutos (más otros 30 minutos de cocción)
Porciones: 2

Preparación

Empiece limpiando los puerros. Marque y retire la parte inferior y luego el mechón cortando donde está el aditamento entre la parte verde (no la tire), que es más coriácea, y la blanca donde comienza la más tierna.

Marque este último verticalmente y retire la piel, si es necesario, enjuague el interior. Por último, pique finamente e introduzca en un bol. 

En un cazo, ponga 1 o 2 cucharadas de aceite, agregue el puerro picado, déjelo cocer unos diez minutos, revolviendo de vez en cuando. Una vez pochado, vierta el vino espumoso y continúe cocinando  otros 5 minutos.

Cuando esté cocido, vierta en el tazón de una batidora de inmersión y luego añada los huevos (2 rojos y 1 blanco), el parmesano, el pimiento y vuelva a operar la batidora para obtener una crema suave. Ponga aparte.

Pase al la panure: en una sartén pequeña caliente un poco de aceite y añada el pan rallado. Tueste unos minutos a fuego alto, removiendo de vez en cuando para que no se quemen; ponga  de lado.

Ahora, dedíquese a la limpieza de las ostras. Ayúdese con una red para limpiar la superficie de las ostras enjuagando bajo un chorrito de agua.

Luego, con un cuchillo especial de hoja fina y protección en el mango, entre dentro de las conchas de cada ostra, cuidando de no desgarrar el molusco y de no hacerse daño. Disponga sobre una bandeja y cuide la composición. 

Rellene la parte cóncava de la ostra previamente privada de agua con una cucharada de la crema de purros y añada un poco de panure. Aromatice con una pizca de pimienta blanca recién molida y unas gotas de la crema de puerros. . ¡Disfruten!